En el 2011, cuando dejé mi empleo y monté mi primer negocio, me llovían las reuniones.
Ideas, oportunidades, negocios paralelos...
Y como buen novato, yo iba a casi todas.
Pensando que me estaba perdiendo la gran oportunidad.
Pasaron dos años de tapones, cafés innecesarios y falsas esperanzas…
hasta que me dije:
“Esto no es el universo premiándome. Esto es el universo probándome.”
¿Tú realmente quieres lo que estás construyendo?
Entonces tienes que protegerlo.
Y para eso, necesitas aprender a decir que no.
Recuerda lo que hablamos del enfoque tipo láser:
Un solo producto. Un solo canal. Un solo buyer persona.
Ese marco te da claridad. Y claridad te da poder para decir que no.
Pero también hay que decirle que no a:
Cierro con una lección de productividad que me cambió la vida:
Así como tú haces una lista de cosas que quieres hacer en el día…
haz una lista de las cosas que definitivamente no vas a hacer.
Ese filtro puede salvar tu energía, tu negocio y tu enfoque.
Nos vemos mañana.
—Félix Rosa, The Money Coach